Cielo Nocturno - Un amor inevitable

-PRIMERA PARTE-

Todos los problemas de los Vulturis fueron acabados. Pero un nuevo conflicto se le presenta a Jacob.
Cuando Jacob se entera que Los Cullen lo alejarán de Renesmee por el bien de ella, no lo puede soportar.
Intentará hacer todo lo que le haga falta para tenerla devuelta, y cuando piensa que está cerca de conseguirlo, un nuevo problema se le presenta.
¿Podrá el amor de Jacob y Renesmee volver a renacer?

57CAPITULO: IMPACIENCIA

martes, 30 de junio de 2009

 

Oficial de Cielo Nocturno - Fanfic hecho por Fans y para Fans - Basado en la novela de S.M.

Estaba cubriendo a Leah, gracias a mi Nessie ya que sabía los efectos de la imprimación.
- ¿Puedo pasar?- Observe la puerta detenidamente, ¿Que me querría decir Seth?
- Si por supuesto, sabes que eso no se pregunta-
- Mira Jake sé que mi hermana y tu no están en el mejor momento pero esta vez es en serio no la hagas sufrir- dijo con voz de hermano protector no pude aguantar y le dije.
- Ya no salgo con ella.- Tenía que saberlo, su hermana era feliz, y quizás pronto los dos lo seriamos, pero nosotros ya nunca volveríamos a ser uno, si es que alguna vez lo fuimos.
- ¿QUE?- Me dieron ganas de decirle “Leah se imprimió” pero yo no era el indicado para decírselo.
- Me dejo -Porque así había sido, de una u otra manera, yo todavía no estaba preparado para hacerlo, pero si la posibilidad que creía verdadera se hacía realidad, no tendría que prepararme y eso paso.
- Ya hablare con ella, no te preocupes-
- No hace falta, quedamos como amigos-Su cara se torno de normal a estupefacta.
- ¿Has visto algo que yo no?-Le dije bromeando
- Simplemente no estoy enterado de muchas cosas que al parecer tu sí.- se avivo.
- Mira Seth por mi parte te digo que esperes tranquilo a que llegue Leah, todo está más que bien- no se lo podía decir pero nada me detenía a darle algunas pistas.
- ¿Lo dices así?,¿quedarme tranquilo?- dijo con voz de confusión, no entendía nada.
- Se paciente, cuando venga te dirá TODO- hice ahínco en esa palabra que le ayudaría a entender.
- NO PUEDO-dijo explotando repentinamente, me asusto- mi hermana sufrió mucho, ahora vienes tu a decirme que te dejo, que vendrá en un rato, creo que lo único que te importa son los Cullen.- Me quede sorprendido no esperaba esa.
-Sabes seth te quiero como un hermano por eso es mejor que te vayas de una vez- El tono de mi voz iba subiendo con cada letra que exclamaba.
- ¿Es que es eso cierto? ella nunca te importo, eres un falso- ¿Cómo me podía decir eso? Sentía ganas de pegarle un buen puñetazo, pero solo estaba enojado, tenía que tranquilizarme.
- Lo siento no me gusta hablar de ese tema pensé que lo sabías-dije para tranquilizarme
- Jacob por favor piensa en los demás, desde que ellos se fueron eres un completo tarado-
- Vete- ya estaba hablando cosas sin sentido.

Tras el chirrido de la puerta al cerrarse, me acosté en el piso que se encontraba muy frío. Espero que Leah llegue pronto, se me está haciendo un gran quilombo por su ausencia.
Mientras mi mente seguía en la deriva, deslumbre un álbum de fotos y lo agarre, al contemplar las fotos me quede mudo, y eso que no estaba hablando, era una fotografía muy vieja de Leah y Sam, si que se veían bien, pero a la segunda ya se encontraba el con Emily, en la tercera estábamos todos en el cumpleaños de Seth, me di cuenta de que esas fotos eran raras, una de cada época, pero al escuchar cerrarse la puerta de la entrada me levante de un salto y abrí apenas la puerta. Al abrirla observe a Leah que estaba saludando a todos, quienes la miraban extrañados en busca de una respuesta.
Me escondí bien para que no me viesen y me detuve a escuchar.

- Leah ¿Que paso?, cuéntanos todo-
- Me paso lo que a todos los lincantropos le sucede, la imprimación- dijo con una voz muy alegre mientras todos estaban sorprendidos por lo que acababan de escuchar. No terminaban de entender lo que escucharon.
- ¿No te habrá parecido?-Le dijo Sue extrañada.
- ¿Quieren que se los presente?-Todos miraron hacía la puerta y entro Pedro, las miradas atónitas de todos era muy cómica. - ¡ES EL PSICOLOGO DE JACOB!- Exclamaron todos al mismo tiempo.
- Si, lo vi y fue todo tan rápido, no lo pude evitar, además mírenlo.-Todos entendieron, por fin, era imposible no notar como lo amaba, como deseaba ver a Ness. En ese momento toda la felicidad que tenía se perdió.
- ¿Como lo tomo él?- Dijo Sue
- Bien, nos entendimos todos, y estamos juntos en todas-Al parecer esa parte estaba dirigida a mí.
- ¿Y qué piensas hacer?- pregunto alguien al que no pude reconocerle la voz.
- Simplemente mudarme con él y por supuesto ayudar a Jake a encontrar a Ness- dijo en voz alta como para que yo lo escuchara. Cada vez que escuchaba su nombre mi corazón palpitaba muy fuerte, era mi nessie y la encontraría.
- ¿No lo dices enserio?- volvió a hablar esa voz irreconocible, que extraño pensé que los conocía muy bien a todos pero eso no importaba ahora.
- ¿Creen que mentiría en una cosa así?-
- No, es que de la nada nos dices todo esto, de tu y el psicólogo de Jacob, que lo ayudaras a él, además ¿Como piensas hacer eso?-
-Pedro es un...-aquí venia la parte difícil de la historia- ..Vampiro, conoce a otros...Vampiros nómadas que vieron a los Cullen- se quedaba trancada al pronunciar la palabra vampiro, sabía que eso no les gustaría para nada a la manada.
-Me parece totalmente fuera de quicio todo esto Leah.-Afirmo Sue. -A mi no y si no les gusta me iré con él y ayudaremos a Jake –dijo muy decidida, una de las razones por las que la amaba era esa, nunca tenía miedo a nada. -Tú y jake definitivamente son el uno para el otro, corrección ERAN el uno para el otro. Ambos son igual de locos al enamorarse de chupasangres eso solo les ocurre a ustedes, ¿Quién será el próximo?-dijo seth de forma graciosa.
-no es momentos para bromas seth esto es algo serio- dijo Sue.
No entendía cual era el problema de Sue, ¿acaso no quería que fuera feliz?, ¿no le alegraba que Leah ahora iba a ser feliz toda su vida y no iba a sufrir más?, no sabía que le sucedía, después lo sabría, y la verdad no me importaba ya que cada vez más me acercaba a mi sueño, a mi nessie, a esa parte de mi que no estaba conmigo y que muy pronto volvería.

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